Entrevistando a José Luis Fernández Juan
Hoy tengo el gusto de entrevistar a José Luis Fernández Juan. Su libro Pinceladas de Harmonía ya ha alcanzado la cuarta edición.
¿Podrías comentar a los lectores cómo se te ocurrió el título de tu obra?
El título es la consecuencia lógica de la esencia de su contenido. El pueblo de es el enclave espacial en donde acontecen las aventuras de sus habitantes. son los trazos sin profundizar que se emplean para contar cada uno de los 17 capítulos que componen la obra.
A partir de ahí la polisemia de estas dos palabras básicas hace el resto…
Pintamos enigmas y desbordamos los límites. Escenario y protagonistas se entreveran en un cadencioso universo pictórico.
Háblame de Pinceladas de Harmonía, ¿por qué debería leerlo el público que nos sigue?
Porque su lectura te hará más libre, te dará experiencia de vida y te potenciará espiritualmente.
Te entretendrás, te reirás, descubrirás alternativas vitales, comprenderás mejor el mundo y además enriquecerás tu dominio del lenguaje.
reúne los ingredientes necesarios para proponer un guiso mondo y lirondo en su harmonía de sabores.
Un gustazo para el paladar literario… y para el resto de sentidos.
¿Cuál es el personaje al que más trabajo te costó darle una identidad?
Cynthia Linderneyder, la amiga de Cloe Guerola.
Ella representa el contrapunto científico al arte vaporoso que tanto fluye por Harmonía. Es ingeniera mecatrónica.
Pinceladas de Harmonía no escapa a la realidad tecnológica del siglo XXI y por ahí llega este personaje.
Tuve que familiarizarme con su ingeniería: robots, sistemas de navegación por satélite, domótica, placas de control electrónico… Cynthia crea productos inteligentes.
Al final conseguí perfilar a Cynthia como el personaje tridimensional que buscaba que fuera. Logré identificar los tres principales rasgos de su carácter (leal, familiar y conversadora) con las tres áreas que integran la disciplina de su Mecatrónica (electrónica, informática y mecánica).
Construir el personaje de Cynthia me creó un vértigo de sentir; después comenzó actuando sola y se acabó adueñando totalmente de la conversación que mantuvo con su amiga en el “Zumo de fresas”. Se redimensionó.
Cynthia Linderneyder se constituye como un personaje necesario para el momento de la trama en que aparece (el anticlímax del penúltimo acto).
¿Necesitaste hacer un profundo trabajo de investigación y documentación para desarrollarla?
Con ella especialmente, pero también con algunos personajes más.
La labor de investigación se me antojaba imprescindible para perfilar con rigor algunas profesiones de ciertos harmonienses, sobre todo las relacionadas con el mundo empresarial (Enzia y Paz), el de la eidomática (Claudio) o el de la construcción (Atenógenes).
Investigar y aprender me resultó un trabajo fascinante. Capté lo medular y puse el toque de pincel…
¿Planificaste tu libro antes de empezar a escribirlo? Si es así, ¿mantuviste esa planificación o fue sufriendo cambios?
Para partía de una peana muy esencial; un espacio que fuera un festín de colores, emociones, optimismo y vida.
A partir de ahí, para que no hubiera morosidad en la duda, tenía que inventar personajes que apoyaran ese contexto. Para cada capítulo tenía que diseñar un personaje como mínimo; y así, pincelada a pincelada fue avanzando la novela.
Los propios personajes me marcaban las líneas de actuación. Cuidar la interconexión entre todo y todos resultó más sencillo de lo previsto. Me dejé llevar.
Al final se creó un bellísimo juego de espejos que consiguió multiplicar vínculos e interpretacionescoherentes.
Me atrae escapar de estructuras clausuradas. En la planificación me gusta ir más allá y no quedarme en mi zona de confort de viajar solo por lo conocido.
Cuanto más expandido vaya el universo de Pinceladas, mejor. Llegará a más receptores y eso siempre es positivo. La realidad de es pura elasticidad.
¿Qué opinas de la literatura que se escribe a día de hoy?
La literatura actual está condicionada por las grandes editoriales y los medios de información que manejan. Puro negocio. El mercado literario actual busca la rentabilidad. Las editoriales publican prácticamente lo que sea con tal de que salgan las cuentas (si eres algún personaje del mundo de la televisión, publicas seguro…y vendes; si eres talentoso pero anónimo posiblemente no publiques…)
Es un contexto literario bastante ingrato. En ocasiones falta conciencia sociohistórica y rigor.
El negocio no es compatible con el riesgo. Las apuestas resultan consensuadas.
Por otro lado, hay que reconocer que la literatura depende de esta industria editorial y que gracias a su apoyo aparecen obras y autores.
Esta realidad me genera sentimientos encontrados de recelo y gratitud.
A mí siempre me ha gustado el boca-oreja; que alguien te recomiende personalmente un libro, que tú te acerques libérrimamente a él y lo descubras. Me parece un proceso más auténtico y puro que el comprar el libro que aparece en los mostradores de las plataformas comercialesen sus permanentes ofertas de novedades.
De esta forma, he descubierto este último año cuatro “gemas” que han escapado al consumismo más inmediato y que me llevan a esperanzarme con el alto nivel de nuestra literatura más vigente : de Daniel Guebel (libro deliciosamente inclasificable como Harmonía), de Peter Godfrey-Smith (mi pasión por los pulpos siempre ha estado ahí), de David Hernández de la Fuente (la mitología griega explicando al hombre moderno) y de Juan José Calvo Almeyda (siempre referente).
¿Para ti escribir es un trabajo o una afición?
No escribo cada día; solamente durante los períodos festivos. Tampoco tengo departamento de promoción. Escribo por afición. El dinero que ingreso por ventas no me permite vivir cómodamente de ellas.
Escribir me satisface y me desconecta de mi trabajo como profesor, que es lo que me reporta el dinero suficiente para subsistir.
Mi pasatiempo (escribir) lo compagino con mi profesión (enseñar) y en este devenir paso del ser a la nada dependiendo de la época. Esta evidencia está patente entre mis pliegues de actuación.
¿Cuántas horas al día o a la semana dedicas a escribir?
En los días de fiesta que escribo literatura, sí hago horario intensivo. Procuro rentabilizar al máximo la jornada. Si no, no hay manera.
¿Te ves escribiendo otro tipo de géneros como por ejemplo autoayuda?
Autoayuda, no; pero poesía, sí.
Me encanta jugar con elementos de valor simbólico e imágenes literarias para que el receptor pueda decodificarlos y comprender sus mensajes implícitos.
La capacidad de síntesis y asociación que ofrece la poesía me motiva a seguir encontrando espacios más allá de los límites del arte.
La poesía está absolutamente presente en ; tanto en indicativo como en subjuntivo. No puedo evadirme de ella.
Mientras escribías tu libro, ¿cuál fue el momento con el que más disfrutaste?
En la elaboración de la pincelada “Yalinka. Mundo Cebras S.L.”.
Este capítulo está dedicado a Yalinka Galdámez. Desde muy pequeña sentía veneración por las cebras y decide crear un emporio de artículos relacionados con estos animales equinos:
Marcadores de páginas de libros fabricados con goma eva con dibujos de cebras, pendientes del móvil de arcilla en forma de cebra, muñecos de cebra antiestrés, paracaídas para corcho de vino espumoso con imágenes de cebra, helados con diseño de cebra con colores crema y naranja, procesos cebriles con estornudos a 28 km. hora…
Ni te imaginas lo que disfruté imaginando la eficacia de todos estos productos.
¿Alguna vez sufriste problemas de inspiración?
En ocasiones sí tuve problemas para introducir aire u otra sustancia gaseosa en mis pulmones.
Cuando esto ocurría iba a Venus Body o a Gym Air y me ponía en forma practicando aerodanza con gente tan entrañable como Druso, Lorelei, Basualdo, Doroteo, Bebo, Luana o Gualberto. Sabiniano acompañaba esta actividad con música de los Beatles.
Inmediatamente se me pasaban todos los problemas de inspiración, de coordinación, de reflejos y de tensión muscular. Recomendable.
¿Vivir de la literatura es posible en estos tiempos?
Por supuesto. Yo vivo de la literatura. Como te he comentado antes, soy profesor e imparto clases de Lengua y Literatura Española y de Llengua i Literatura Valenciana.
Si te refieres a poder vivir con el dinero que puedes obtener desde tu humilde condición de escritor de obras literarias, la respuesta es categórica:
¡Nomás unos pocos privilegiados pueden vivir de la literatura!
Si quieres seguir vinculado con la literatura hay opciones más seguras que te generen fuentes de ingresos: Talleres, cursos, correcciones, prensa, traducciones, conferencias…
¿Las redes sociales te han ayudado a difundir tu libro y darlo a conocer?
Totalmente. no tiene una potente infraestructura detrás a cargo de una editorial que te garantice publicidad de alcance mayoritario. Has de buscarte la vida.
El éxito de viene por el boca-oreja y este boca-oreja procede precisamente de la difusión por las RRSS.
Tengo el blog “pinceladasdeharmonia.com” y un canal de youtube “joseluisfernandezjuan”. Estas dos plataformas recogen presentaciones, firmas de libros, entrevistas (radio, prensa, televisión) o cualquier acto social relacionado conmigo y con mis obras.
RRSS como Facebook, Twitter o Linkedin se hacen eco de todas estas publicaciones y las viralizan.
Las RRSS generan comunidad, proyección y masa crítica de comentarios.
A ellas principalmente debo la difusión y éxito de . En las RRSS existe un magma cultural que favorece el dar a conocer contenidos de autores que no pueden acceder a los circuitos más comerciales y mayoritarios controlados por los grandes emporios. Las RRSS son nuestro futuro en clave contemporánea.
¿Tienes en mente sacar una nueva novela?
Acaba de salir mi último libro: .
Se trata de un glosario de casi 1.800 palabras de significados novedosos e hilarantes que te garantizan casi 1.800 carcajadas versátiles, sutiles y cómplices. Te avanzo algunas:
Admunición: Amonestación que se realiza cuando descubres que alguien posee material bélico.
Badudaque: Persona que no tiene clara si es necia o informal.
Concejal: Edil peludo que gobierna sobre la cuenca del ojo.
Espabillarse: Avivarse jugando con un taco y bolas en una mesa rectangular con barandas.
Jardín A 4: Terreno en donde se cultiva el formato de papel estándar.
Murpiélago: Mar quiróptero.
Sandalias: Mote de arena.
Taladrar: Emitir sonidos perrunos tan agudos que te llegan a perforar los tímpanos.
Uníboca: Sumidero de un solo significado.
Yanquimera: Sueño estadounidense.
Te agradezco tu tiempo y te deseo mucho éxito.
