Caridad Bernal
Caridad Bernal comienza a escribir relatos cortos en su adolescencia, fascinada por la magia que envuelven las historias de terror gótico de Edgar Alan Poe, Mary Shelly ó Bram Stoker. A los dieciocho años escribe en una libreta de cuartilla su primera novela nunca editada que titula “Historias de una escalera”. Obra que su hermana se verá obligada a corregir, empezando por el título, siendo éste el mismo de una obra de teatro de Antonio Buero Vallejo.
Pasan los años, y Caridad descubre un nuevo tipo de literatura emergente, el género chick-lit. Acompaña sus lecturas con la creación de sus propios cuentos, cada vez más influenciados por las autoras que lee, ya que no pierde la sana costumbre de escribir. Nunca hasta ese momento habría considerado la posibilidad de publicar algo, hasta que conoce casualmente a Jose María Pérez Collados, quien publica en su blog algunos textos suyos y le anima a seguir escribiendo: “Sin duda hay algo en tu manera de escribir que engancha al lector, y eso es algo muy difícil de conseguir. Caridad: practica, practica, practica y sigue leyendo a otros autores… ”
La realidad hace que nuestra autora pierda la esperanza por convertirse en escritora, no hay respuesta por parte de las editoriales y nadie más parece interesado en sus escritos. Decepcionada, decide abandonar su hobby durante años, hasta que vuelve a retomarlo durante su baja de maternidad. Siguiendo los consejos de su hermana, se pone de nuevo frente a la pantalla de un ordenador para escribir: “Pescando salmones en Alaska”, novela que resulta ser mención especial en el IV premio internacional de novela romántica de la editorial HQÑ.
Animada por el buen recibimiento de su primera obra publicada, una escritora novel todavía desconocida decide mejorar su estilo y profundizar en una nueva trama, surgiendo entonces su segunda novela: “Estocolmo de noche”, que nada tendrá que ver con la primera. Ahora resultará más difícil escribir: compaginando la promoción de “Pescando salmones en Alaska”, con el trabajo y el cuidado de un bebé. Pero Caridad parece hacerse fuerte frente a las adversidades, como la protagonista de su nueva historia, y propone hacerse un hueco entre sus compañeras a las que tanto admira.